7.05.2004
5 julio 04
Abrazados y en silencio por unos instantes, bajo la luz de la lámpara de la calle y de las miradas de sus vecinos. Aunque sabían el tiempo exacto de su separación, sabían que ese viaje cambiaria el rumbo total de su vida...
Ella por dentro deseaba decirle que no se fuera, que se quedara con ella por siempre, pero no se atrevía por el pacto que habían jurado... Sus ojos brillaban a contra luz y se veían asomar algunas lagrimas tras el maquillaje.
- te quiero mucho, por favor cuídate. y cuando te sientas triste y distante piensa (deseaba tanto poderle decir que pensara en ella) en lo pequeño que eres y en que el tiempo transcurre tan rápido...
El con la simpleza que lo caracteriza solo contestó: yo también te quiero mucho mujer...
Como si una fuerza extraña se apoderase de ella y perdiese su entereza por unos instantes, le pidió sutilmente que se quedara unos momentos mas...
Se abrazaron en el silencio que la noche le renta a los amantes callejeros. Ella le pidió que se alejara rápidamente para no sentir el dolor que viene junto con las despedídas; pero la verdad es que ya era demasiado tarde, su corazón palpitaba y se contraía una y otra vez tan rápido, que era seguro que ya estaba mal herido. Por unos segundos se unieron sus labios. Desde lejos se vio caer su corazón en un charco y fue aplastado por un auto que circulaba en ese instante. El ni si quiera se percato del accidente aquel.
Ella solo volteo a ver lo que restaba de su corazón y con una voz tenue e irónica le dijo: hum justo cuando pensé que ya te me habías olvidado.
carmilla@hash-davenport.zzn.com
Ella por dentro deseaba decirle que no se fuera, que se quedara con ella por siempre, pero no se atrevía por el pacto que habían jurado... Sus ojos brillaban a contra luz y se veían asomar algunas lagrimas tras el maquillaje.
- te quiero mucho, por favor cuídate. y cuando te sientas triste y distante piensa (deseaba tanto poderle decir que pensara en ella) en lo pequeño que eres y en que el tiempo transcurre tan rápido...
El con la simpleza que lo caracteriza solo contestó: yo también te quiero mucho mujer...
Como si una fuerza extraña se apoderase de ella y perdiese su entereza por unos instantes, le pidió sutilmente que se quedara unos momentos mas...
Se abrazaron en el silencio que la noche le renta a los amantes callejeros. Ella le pidió que se alejara rápidamente para no sentir el dolor que viene junto con las despedídas; pero la verdad es que ya era demasiado tarde, su corazón palpitaba y se contraía una y otra vez tan rápido, que era seguro que ya estaba mal herido. Por unos segundos se unieron sus labios. Desde lejos se vio caer su corazón en un charco y fue aplastado por un auto que circulaba en ese instante. El ni si quiera se percato del accidente aquel.
Ella solo volteo a ver lo que restaba de su corazón y con una voz tenue e irónica le dijo: hum justo cuando pensé que ya te me habías olvidado.
carmilla@hash-davenport.zzn.com
Comments:
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vaya, vaya, mi niña....
pues este cuentito, la neta, me ha latido mucho. muy buen ritmo, muy buena idea, mucho sentimiento y mucha lágrima... la felicito, cada vez escribe mejor... venga que yo la quiero leer más...
y disculpe que no haya podido ponerle comentarios a sus posts hasta el día de hoy, pero por acá andaremos...
cuídeseme mucho, y suerte...!!!
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pues este cuentito, la neta, me ha latido mucho. muy buen ritmo, muy buena idea, mucho sentimiento y mucha lágrima... la felicito, cada vez escribe mejor... venga que yo la quiero leer más...
y disculpe que no haya podido ponerle comentarios a sus posts hasta el día de hoy, pero por acá andaremos...
cuídeseme mucho, y suerte...!!!
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