5.11.2007

dialogos internos

Te quiero para protegerte... eso me dijiste, pero quién me protege cuando lo que más me lastimó fueron tus acciones y palabras?

He aprendido a odiar el veneno que tus palabras hacían correr en mi cuerpo.



Carmilla Hash Davenport

Comments:
¿Dónde ha quedado la guirnalda inmóvil
y en esa luna casa vieja mi galeón?
¿Qué fue del cándido sonar de los colegios,
del beso tibio que jamás conseguí?

Vamos, Maravilla Mar y suéltate,
desempolva tu vestido y ven,
sé mi panal imaginario intrépido
y cual inmensa noche vuelve a mí.

En esa pálida vertiente ingenua
que chapoteaba siendo niño, se fue
mi bici roja, mi bandido escarabajo:
Camilo trino, campanada y papel.
 
Publicar un comentario



<< Home

This page is powered by Blogger. Isn't yours?